martes, 25 de septiembre de 2018

FUNDACIÓN CONVENTO MÍNIMOS DE LUCENA - Parte 5

...y cinco, replicó el Eminentísimo Sr. Cardenal Zalazar Obispo de Córdoba, diciendo que no podía por ninguna manera dar licencia para que tuviéramos Iglesia con puerta a la calle, ni campanas, que lo más que podía hacer era darla para que en una casa particular se fundara el Hospicio, asistiendo en él solamente dos Religiosos sin que pudieran pedir limosna, y otras limitaciones semejantes. Visto esto por la Provincia, desistía de la fundación, y viendo el Sr. Dn. Gerónimo Gil Guerrero que no se proseguía, sintiéndolo mucho su devoción, escribió a N. Rvdmo. P. Fr. Alonso Guerrero (que era Provincial de esta Provincia y quien diligenció la licencia de su Excma.), diciéndole que aceptara su Revdma. la fundación con las limitaciones que decía el Sr. Cardenal Zalazar, Obispo de Córdoba, que en adelante sería Dios servido que tomáramos la Iglesia. Hízose como su merced lo ordenó, y trajo facultad para comprar la casa (que es la inmediata a la Iglesia) el R. P. Lector Jubilado Fr. Juan de Cárdenas y Carrasco, y siendo así que en ella se tomó la posesión, sin permitirnos la Iglesia, antes sí por la calle íbamos a ella a decir Misa, fue nuestro Señor servido, y podemos decir que fue el suceso milagroso, pues luego que llegó la ocasión de dar la licencia su Eminencia no expresó en ella alguna de las limitaciones, antes sí manifestó el gran gozo que tenía de ver en Lucena a los hijos del gran Mínimo de Paula, y en el mismo mes de Febrero del mismo año permitió se abriera puerta por la Casa, para que pasáramos a la Iglesia a usar de ella como propia, pues aunque el Capellán estaba dentro viviendo, hizo el Sr. Dn. Gerónimo que cediera su jurisdicción en el R.P. Vicario Provincial sin entrometerse en cosa alguna que en decir Misa...



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.